El consumo de hortalizas frescas en los siete primeros meses del año se ha situado en 1.337 millones de kilos, un 2% menos que en el mismo periodo de 2024, retrocediendo hortalizas muy consumidas, como tomate, con 315 millones de kilos, un 3% menos; pimiento, con 109 millones de kilos, un 5% menos y el grupo de lechuga, escarola, endibia…, con 91 millones de kilos, un 1% menos. La cebolla, por el contrario, se ha mantenido en el mismo volumen de consumo que el año anterior, con 162 millones de kilos.
El consumo de patata también ha descendido en los hogares un 2% totalizando 474 millones de kilos, según datos del Panel del Consumo Alimentario del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, procesados por FEPEX.
Respecto a las frutas, el consumo ha subido un 2% hasta el mes de julio, ascendiendo a 2.203 millones de kilos. Naranja, plátano y sandía han sido las más compradas en el periodo analizado y en los tres casos han crecido. El consumo de naranja en los hogares se ha situado en 364 millones de kilos (+6%), la de plátano se situó en el mismo volumen, 364 millones de kilos (+2%) y la de sandía fue el que más creció, con un 17% más y 241 millones de kilos.
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Ha destacado también el crecimiento de fresa, con 108 millones de kilos consumidos en los hogares, un 5% más y el de uva, que, aunque un consumo más reducido: 31 millones de kilos, fue uno de los que más creció de toda la categoría, con un 27% más.
En cuanto al valor, el consumo de frutas y hortalizas en los hogares hasta agosto de este año se ha situado en 9.140 millones de euros, un 8% más que el año anterior, de los que 5.184 millones de euros correspondieron a frutas (+11%), 3.361 millones de euros correspondieron a hortalizas (+4,5%) y 595 millones de euros a patata (+1%).
