La obtención de esta variedad por parte de la empresa malagueña Viveros Santana, la mayor productora de plantas de boniatos de España, en colaboración con el Instituto de Sanidad Vegetal de Sao Paulo (Brasil), exigió cinco años de investigación.
Esta campaña ya está a disposición de los consumidores. Tiene el nombre de pepita y se caracteriza por ser púrpura tanto por fuera como por dentro, tener un sabor a castaña asada, ser ideal para asar, freír -resulta muy crujiente- e incluso para hacer en purés o cocida. Es el resultado de diversos cruzamientos con la variedad beuregartd como base.
Esta es la primera campaña en la que se han comercializado los plantones de esta nueva variedad pepita por parte de Viveros Santana, con sede en Vélez.
La empresa dedica cada año una media de unas 20 hectáreas a la producción de plantones de boniatos, sobre todo de las variedades beuregard, california, georgiajet, jewel, o’henry y ahora pepita. Entre los productores malagueños que han apostado por el cultivo de pepita se encuentra la familia Hevilla, en el Valle del Guadalhorce.
Las batatas se cultivan y consumen en todo el mundo. China destaca a nivel mundial con una producción de más de 70 millones de toneladas en 2014.
La superficie de cultivo dedicada a la batata en Andalucía se ha incrementado un 40% entre 2015 y 2017, pasando de apenas unas 857 hectáreas a 1.448. La producción ha pasado de 20.972 a 50.239 toneladas. En Andalucía el cultivo de batatas ocupó una superficie de 1.448 hectáreas en 2017.
Fuente: Diario Sur
