La mayoría del territorio ha recibido bien las lluvias, especialmente en zonas de interior como el Alto Palancia, el Alto Mijares, Els Ports, los Serranos, Utiel-Requena, el Valle de Ayora-Cofrentes y la Hoya de Buñol, entre otras.
En estas comarcas, donde la sequía del año pasado, agravada durante las últimas semanas, ha castigado con dureza los cultivos, las lluvias están contribuyendo a humedecer la tierra y recargar embalses.
Concretamente, el agua está siendo muy beneficiosa en el desarrollo de los cereales de invierno, que se encuentran en época de germinación, así como en en otros cultivos que están empezando su ciclo vegetativo de cara a la próxima campaña.
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Asimismo, en regadío, las precipitaciones permiten un ahorro de los costes de producción, especialmente en riego de explotaciones que, en muchos casos, ya se estaban regando. Todo ello, pese a los casos puntuales donde las lluvias han provocado arrastres de tierra y dificultades de acceso a los campos. En estos casos, la asociación muestra su inquietud ante los encharcamientos en ciertas zonas, ya que, si el temporal se prolonga se incrementará el riesgo de aparición de hongos por exceso de humedad.
«Agua desperdiciada»
El presidente de AVA-ASAJA, Cristóbal Aguado, urgió a impulsar infraestructuras de almacenamiento, retención y conducción de agua en la Comunitat Valenciana, advirtiendo que, pese a las abundantes lluvias, la falta de estas dotaciones ha provocado un gran desperdicio de agua, sin aprovechar su potencial para el abastecimiento.































































































