Almería vuelve al punto de partida: “el escenario de precios claramente insuficientes de hace 2 años”. Es el resumen del avance de resultados de la “irregular” campaña hortofrutícola 2023/2024 presentado este jueves por Coexphal. Y es que, aunque ha sido la tercera mejor campaña en precios de la última década, el incremento de costes del 25% que ha sufrido el sector en los últimos tres años respecto a los 7 anteriores, y la contención de precios al consumidor que se ha hecho en buena parte de los mercados de destino ha repercutido en origen, desequilibrando la balanza.
Toca “afinar mucho para poder cubrir los costes estructurales, porque estos no van a bajar, han venido para quedarse”, han explicado Juan Antonio González y Luis Miguel Fernández, presidente y gerente de Coexphal, durante la comparecencia en las nuevas instalaciones del CIT COEX. Así, el reto para Almería es poder seguir trabajando estrechamente con la cadena para seguir ofreciéndole un suministro con garantías y percibir por ello un precio “suficiente”.
En este sentido, han querido remarcar que “Marruecos no ha sido capaz” por los problemas que ha tenido (expansión del virus del rugoso en tomate, climáticos, problemas por falta de mano de obra, escasez hídrica…). Y por primera vez en 7 campañas de incremento ininterrumpido, ha frenado su ritmo de crecimiento y sus exportaciones han caído un 6%.
Principales cifras en 2023/24 
El avance de resultados de la campaña almeriense de septiembre a junio refleja un aumento de la producción del 6%, una caída media de los precios del 17% y una reducción de los ingresos del 12%. Aunque la tendencia alcista de los costes se ha frenado y ha cerrado la campaña con un descenso del 3,6% de media para todos los cultivos, el crecimiento acumulado sigue siendo del 15%.
Situación comprometida para el tomate
En 2023/2024 la comercialización de tomate crece de manera importante en volumen (+8%), sobre todo en la parte fundamental de la campaña de enero a junio. Los precios caen un 20% y los ingresos descienden también un 14%. La situación vuelve a ser comprometida una vez solventadas las caídas puntuales de la oferta internacional del año anterior, fundamentalmente la holandesa de invierno, y los vaivenes de las ventas marroquíes. Hay que considerar que la campaña pasada el tomate tuvo un incremento de los ingresos del 10%, por lo que este ciclo supone un importante retroceso.
La comercialización de tomate suelto, pera y cherry aumenta un 12%, 7% y 7%, respectivamente. En todos los casos se aprecia una caída superior del precio: 24%, 27% y 13%, respectivamente. Cae, en contraposición, un 3% la producción del tomate en rama, que a pesar de la menor oferta tampoco consigue precios más altos (un 18% menos).
Por su parte, la producción comercializada de tomate ecológico muestra un aumento del 9%, pero su precio cae un 5%, siendo el menor descenso en todas las tipologías. El tomate ecológico supera el 12% de las ventas, porcentaje que no crece en la última campaña.
Sandía, la reina
Si ha habido un producto que se ha comportado especialmente bien en este ejercicio respecto al anterior, ha sido la sandía. La campaña ha sido buena en calidad y en cifras, con un notable incremento de precio (+28%) y facturación (+29%). La superficie ha crecido un 1% t los costes han menguado un 4,5%.
Desde Coexphal señalan, sin embargo, que todavía no se puede hablar de vuelta a la normalidad, ya que el año pasado las cotizaciones cayeron un 41%, al igual que los ingresos (30% menos).
En melón la producción sigue cayendo (-4%), aunque los precios aumentan (+13%), estimulados por el buen comportamiento del mes de mayo (en junio estuvieron por debajo de los de 2023). Desde Coexphal indican que los ingresos totales han crecido un 8% y recuerdan que el año pasado los precios cayeron un 30%, aunque los ingresos no se resintieron por un aumento de la comercialización superior al 50%.
Berenja, la cruz de la moneda
La berenjena es el producto con peor resultado en esta campaña. Los precios cayeron de forma abrupta en octubre, se recuperaron entre noviembre y enero, y volvieron a descender entre febrero y junio. Este comportamiento, unido a problemas de calidad, ha hecho que tuviera que ser declarada la extensión de norma en varias ocasiones. En términos generales la producción creció un 14%, y los precios y los ingresos cayeron un 33% y un 24%, respectivamente.
Más pimiento, pero menos precio
En pimiento ha habido un incremento relevante de la producción del 7% (principalmente de febrero a abril) que ha derivado en una caída de precios del 21%, e ingresos un 16% más bajos que un año antes. En la campaña pasada el pimiento fue el cultivo que mejor se comportó con un +26% de ingresos y un -13% de volumen.
Caída de precios e ingresos en pepino
El pepino sigue la misma tendencia que los productos anteriores. La producción crece un 5%, con un fuerte tirón en febrero y marzo. Los precios caen un 23% y los ingresos también descienden un 19%. No hay de olvidar que en la campaña pasada los ingresos crecieron un 13%, explican desde Coexphal.
Calabacín, errático
El calabacín enlaza dos campañas en positivo y muestra un aumento de la comercialización del 8% y una caída del precio del 19%. Como consecuencia, los ingresos totales caen un 13%. Este producto ha tenido un comportamiento errático. La campaña comenzó con precios bajos, que fueron subiendo hasta llegar al máximo en diciembre, a partir de ahí se produjo un cambio radical de tendencia. Desde febrero los precios se mantuvieron bajos hasta junio. El año pasado la campaña cerró con un aumento de los ingresos del 17%.
Situación “asumible” para la lechuga
La lechuga acaba también el ciclo con precios negativos (-6%, pero relativamente mejor que los productos típicos de invernadero. La producción aumenta un 2%. Como resultado, los ingresos caen un 4%. El año pasado los ingresos sumaron un aumento de 14%, por lo que la situación sigue siendo asumible.
Planta ornamental
En los últimos años, el sector de la planta ornamental está adquiriendo una importancia alta dentro de la comercialización agrícola provincial. La sección de ornamental de COEXPHAL está compuesta por un 39 empresas. En 2023/24 este grupo facturó cerca de 60 millones de euros, casi todo en el mercado exterior, pero con un mercado interno consolidado. Este dato supone un aumento de 14% respecto a un año antes, siendo el resultado de un crecimiento de los precios del 22% y un descenso 6% en el número de unidades vendidas.
Almería recupera el pulso exportador en tomate
Al margen de los resultados económicos, que no han sido positivos, Almería recupera el pulso exportador en cuanto al volumen de tomate. En 2023/24 se observa un incremento de los envíos al exterior del 3%, sobre todo resultado del aumento en el periodo enero a junio. Alemania gana casi dos puntos de cuota, siendo el principal cliente (representa el 36% de los envíos de Almería). Estos dos puntos se pierden en Francia, segundo comprador y principal destino de las exportaciones de Marruecos, que baja un punto (actualmente representa el 12% de las ventas almerienses); y Reino Unido, donde Marruecos lleva creciendo aceleradamente en las últimas campañas, que cae otro punto porcentual y pasa a ser el 6% del total vendido.
A partir de enero, Marruecos volvió a recuperar el ritmo exportador. “Según el análisis realizado queda patente que el sector marroquí está empezando a sufrir fuertes desequilibrios internos favorecidos por la necesidad de mano de obra no cubierta, aumento de los costes productivos, falta de agua, estructuras no preparadas para la meteorología adversa, entre otros asuntos. Sin embargo, en este entorno, el tomate español reafirma su mayor confiabilidad y su compromiso tanto en calidad como en seguridad alimentaria, donde Almería está a la cabeza desde hace muchos años, como está quedando demostrado”, ha afirmado Luis Miguel Fernández.
Con respecto al resto de competidores, Países Bajos vuelve a crecer, enlazando dos campañas en positivo: recupera el nivel previo a la crisis iniciada por el aumento del coste de la energía. Es destacable cómo los envíos franceses caen arrastrados por el descenso de ventas de Marruecos, confirmándose el comercio de reexportación de tomate marroquí desde Francia.
NOTICIA RELACIONADA: Francia protesta contra el «fuerte crecimiento» de la importación de tomate marroquí
Destaca también que las importaciones españolas de tomate marroquí caen por segundo año consecutivo, tanto por la mayor predisposición del consumidor nacional al tomate local, como por la menor oferta marroquí. El consumidor europeo debe buscar alimentos de garantía que no ofrece los productos marroquís o turcos, tal y como demuestran los cientos de notificaciones de alerta sanitaria todos los años.