La campaña Moyca echa a andar: 57 variedades, 5 continentes y la calidad por bandera

La firma cuenta con 2.300 hectáreas de cultivo en Murcia, Alicante, Almería, Granada y Badajoz
MOYCA

Moyca, empresa especializada en la producción y comercialización de uva de mesa sin semillas, vive en junio su momento más importante del año. La llegada de este mes en el que el calor ya es latente marca el inicio de su campaña, una época del año en la que la firma procede a la recolección de sus 57 variedades, desde las más tempranas, que comienzan ahora a ser recogidas, a las más tardías, que serán arrancadas de la parra en noviembre.

Toda esta fruta se ubica en las más de 2.300 hectáreas que la firma tiene en España, principalmente en la Región de Murcia, una de las zonas vitivinícolas más importantes del país, pero también en Alicante, Almería, Granada y Badajoz. En estos terrenos Moyca cultiva un extenso catálogo de variedades en el que hay tanto opciones más tradicionales hasta otras más exóticas, como las que saben a algodón de azúcar, mango o moscatel.

La producción de todas ellas es posible gracias al trabajo desarrollado tanto en las plantas de producción como en campo por todos los empleados de la firma, que forman parte de un engranaje perfecto que da como resultado uvas del mejor calibre y sabor. En total, Moyca genera más de 10.000 puestos de trabajo al año de manera directa, sin contar aquellos indirectos que se producen en las empresas que le dan soporte.

Tecnología y tradición, la combinación perfecta

La gran demanda que recibe Moyca durante todo el año no es casualidad, sino que es resultado de la eficiente labor que llevan a cabo todos los departamentos y que mezcla tecnología y tradición. Sus plantas de producción, completamente automatizadas, representan el máximo exponente de innovación aplicada al sector agroalimentario: eficiencia, trazabilidad y control de calidad en cada fase del proceso.

NOTICIA RELACIONADA: Moyca amplía su superficie de cultivo con 100 nuevas hectáreas

Por su parte, en el campo a este desarrollo tecnológico se une un trabajo manual que se encargan de llevar a cabo los técnicos para cuidar cada racimo, asegurar su correcto crecimiento y conseguir que cada parra produzca las mejores uvas. De forma manual se llevan a cabo, por ejemplo, actividades como el deshoje, que es la retirada de algunas hojas de las parras para mejorar la aireación y facilitar la entrada de luz, o el raleo y los despuntes, que consiste en planificar cuidadosamente qué racimos se quedan y cuáles se sacrifican para conseguir el crecimiento equilibrado de la planta y la correcta maduración de la uva.

Destino: los lineales de todo el mundo

Una vez que esta fruta se recoge su rumbo es muy variado. La capacidad exportadora de Moyca permite que el consumidor final pueda encontrar sus productos a lo largo de todo el mundo durante los 365 días del año. Europa, y en concreto Reino Unido, es su principal destino, aunque también se vende en los lineales de América, África y Asia, como los de Estados Unidos, Canadá, Dubái, Sudáfrica, Hong Kong y Malasia. La calidad de esta fruta no solo lo confirma el interés de todos estos países, sino que también viene avalada por el estricto seguimiento de todos los protocolos y las certificaciones más importantes a nivel internacional.

TE PODRÍA INTERESAR

Newsletter fruittoday

Cada miércoles en tu email las noticias más destacadas de la semana hortofrutícola