“Los clientes ya entienden los problemas que podemos tener”

Tras dos años de contratiempos climáticos, Agrícola Navarro de Haro mantiene sus programas y suma nuevas zonas para seguir dando la mejor calidad y servicio

Agrícola Navarro de Haro continúa con la tónica de estabilidad, y para esta campaña de sandía mantiene la misma planificación que en el ejercicio pasado. “Si no ocurre nada, llegaremos a las 50.000 toneladas de sandía y tenemos una superficie de 700 hectáreas, con 100 has en invernadero y 600 al aire libre”, adelanta el gerente, José Navarro.

Aunque el ejercicio pasado fue muy irregular en cuanto a producción debido a los cambios climatológicos, este año esperan que la situación sea distinta. “Somos muy conscientes de que los cambios climatológicos han llegado para quedarse y sabemos que, si no ocurre una cosa ocurrirá otra… Ahora el tema es adaptarnos e intentar ir saltando los obstáculos que se nos presentan campaña tras campaña”.

Respecto a los programas con clientes, José Navarro asegura que después de las dos últimas campañas, “nuestros clientes ya entienden los problemas que hemos tenido y los que podemos tener. Si algo nos caracteriza es por dar la mejor calidad y servicio a nuestros clientes, y han sabido ver y valorar el esfuerzo que hemos tenido que hacer para fallar lo menos posible”. Gracias a ello, mantienen los programas e intentarán crecer.

Novedades

Para afrontar mejor las vicisitudes climáticas, en Agrícola Navarro de Haro están haciendo pruebas de todo tipo. “Llevamos varios años realizando ensayos con variedades más resistentes y viendo cómo se adaptan en nuestras zonas de producción. Es muy importante conocer las nuevas variedades y cómo se comportan en nuestras zonas productivas”. Además, han empezado a producir en nuevas áreas de Murcia y la comarca de Los Vélez (Almería),

y están viendo el comportamiento de los cultivos y “aprendiendo” a cultivar en ellas. En este sentido, avanzan que “prevemos introducirnos en nuevas zonas ya de cara a la campaña del año que viene”.

En materia de eficiencia y sostenibilidad, están incorporando en todas las fincas sondas de riego para que la planta tenga todo lo que necesita en cada momento y, al mismo tiempo, ahorrar en agua y fertilizantes.

También están llevando a cabo distintas actuaciones de mejora. En el almacén: en materia de luminaria; en manipulado, han ampliado la línea de sandía; y han introducido un nuevo láser para “grabar” la sandía. Para el campo, han adquirido una nueva máquina de recolección.

Costes y mano de obra

Aunque poco a poco algunos insumos han comenzado a bajar de precio, la subida de la mano de obra repercute de forma importante en la actividad agrícola. En el caso de Agrícola Navarro de Haro, la apuesta por conseguir una calidad ‘extra’ les ha llevado a eliminar muchos procesos mecánicos volviendo a hacerlos de forma manual. “Nosotros trabajamos la sandía prácticamente con la misma delicadeza que si tratáramos con huevos, por lo que el diferencial de costes creemos que se mantendrá igual” (pese a la bajada de insumos). Entre campo y almacén, la empresa emplea a 300 trabajadores, y en verano eleva esa cifra hasta rondar los 500.

Más que sandía

En Agrícola Navarro de Haro, además de ser especialistas en sandía, trabajan con otros cultivos para abastecer a su clientela. “En lechugas estamos en 13 millones de piezas, en coliflor producimos 4 millones de piezas y, en calabacín, 3 millones de kilos”.

Además de abastecer al mercado nacional, sus productos llegan principalmente a Alemania y países nórdicos, y a otros como Francia, Reino Unido, Holanda e Italia.

TE PODRÍA INTERESAR

Newsletter fruittoday

Cada miércoles en tu email las noticias más destacadas de la semana hortofrutícola