Trapview, la trampa automatizada de EFOS, lleva más de una década aplicándose a la manzana y en la pasada edición de los Premios Interpoma 2024 ha obtenido la Mención Especial. Un reconocimiento de prestigio que avala el buen hacer de esta herramienta.
El software de procesamiento de datos de Trapview está basado en principios de aprendizaje automático que permiten identificar la polilla de la manzana con más de un 90% de precisión. A ello se une el control humano, mejorando aún más esa precisión.
Trapview
Trapview elabora el modelo predictivo combinando datos de capturas con datos ‘meteo’ (de la sonda meteo y previsiones de Meteoblu). La empresa utiliza esta información en modelos que permiten evaluar la evolución del insecto fitófago en todas sus etapas de crecimiento, así como planificar y simular dónde, cómo y cuándo se deben adoptar medidas de protección.
Para Vincent Joly, managing director de Trapview en Francia y España, las ventajas de esta herramienta se pueden sintentizar en dos palabras: “seguridad y ahorro”.
A través de la instalación de las trampas se monitorizan posibles desarrollos de plagas y se pueden prevenir amenazas. “En frutales algunas de las plagas que vemos son Carpocapsa, Grafolita y hemos detectado un aumento de la presencia de Ceratitis (mosca mediterránea)… En el caso de la mosca mediterránea, alcanza casi 15 generaciones al año, va muy rápido. Y cuanto antes detectes su presencia, antes puedes ponerle remedio y atacar”.
La información es poder. Y lo ejemplifica con el caso de un cliente en Francia que el año pasado detectó la aparición de la plaga 11 días antes que el organismo público competente. “Si no hubiera sido por Trapview, habría perdido un 20% de la producción”, aseguró el cliente a Vincent Joly.
Gracias a la previsión no solo se logran cultivos de mayor calidad y más saludables, además, los productores llevan aparejado un ahorro en fitosanitarios. En Francia, pruebas independientes en plantaciones de manzanas han mostrado un ahorro de hasta un 30% en aplicaciones de insecticidas en comparación con los protocolos estándar de protección vegetal. Esto permitió a Trapview obtener la certificación CEPP del Ministerio de Agricultura y Alimentación para su uso en plantaciones de frutales y en viñedos.
IA y tecnologías digitales
Trapview es una solución de agricultura de precisión que utiliza tecnologías digitales e inteligencia artificial. Cada trampa puede monitorizar hasta 30 hectáreas, dependiendo del cultivo, la plaga y el área. No requiere intervención del operador, salvo para colocar la trampa en la zona de monitoreo y reemplazar la feromona una vez al mes. Con células fotovoltaicas y una batería de almacenamiento, es autosuficiente en energía y no requiere mantenimiento, al menos durante una temporada de cultivo. Además, cuando la placa que atrapa los insectos está llena, se puede avanzar el rollo de forma remota.
Además, Trapview utiliza sensores inteligentes para recopilar datos y fotografías que se almacenan y procesan en una plataforma en la nube. La información genera informes automatizados personalizables que pueden visualizarse en tiempo real, diariamente, desde cualquier dispositivo informático, a través de una app y en forma de infografías y tablas.
Gracias a todo ello, se consigue un ahorro en mano de obra. “Según un distribuidor de Francia, tener un operario que controle una trampa clásica cuesta 500€ al año. En nuestro caso, no hace falta. Solo es necesario trasladarse para cambiar la feromona una vez cada seis semanas”.
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Vincent Joly destaca la versatilidad de Trapview, utilizado actualmente en un importante número de cultivos de todo el mundo. “En Brasil se usa para tomate al aire libre con el objetivo de monitorizar problemas como la Tuta absoluta y permite un ahorro de entre el 20 y el 30% en tratamientos. En España tenemos un proyecto en expansión. Hemos llevado a cabo una buena experiencia en lechuga en el Campo de Cartagena con Proexport, estamos introduciéndonos en Almería dentro de las hortícolas, se usa en frutales en Cataluña, Aragón, Murcia y Extremadura… al final, lo realmente interesante es crear una red colectiva para poder hacer frente a las plagas de forma efectiva”.

























































































