Si tienes algo de espacio en casa, seguramente te hayas preguntado alguna vez cómo poder plantar fresas en casa. Realmente es bastante sencillo si sigues unos pasos detallados. A continuación te los explicamos:
La temporada resulta clave
Como bien sabrás, todos los vegetales cuentan con una época ideal de cosecha o temporada en base a sus características bioquímicas, la composición del suelo y los factores ambientales como temperatura, humedad o luz que afectan la forma en que la planta se desarrolla.
Concretamente, las fresas se encuentran cómodas entre los meses de noviembre y marzo. Esta época invernal no es un problema para su desarrollo, de hecho aguantan bastante bien el frío. A pesar de ello, son preferibles los lugares soleados para su desarrollo.
Cómo plantar fresas en casa
En primer lugar necesitamos las semillas de fresa. Podemos adquirirlas en un establecimiento de confianza o bien recolectarlas nosotros mismos. Las semillas de la fresa se encuentran en la piel, por lo que debemos cortar las fresas en tiras finas horizontales que dejaremos secar para poder extraer las semillas.
Una vez tengamos las semillas es importante que manejemos con cuidado su crecimiento. En primer lugar pondremos 2-3 semillas en el semillero y regamos con abundante agua.
Cuando las semillas hayan dado sus primeras hojas, entonces será el momento de trasplantar hacia una maceta para que cojan más fuerza. Una vez hayan alcanzado los 8 cm aproximadamente, entonces plantaremos en su lugar definitivo. Después enterraremos bien una parte del tallo para crear más raíces y que la planta vaya absorbiendo más nutrientes sobre el terreno.
Cuidado de las fresas
Realmente, las fresas son frutos que no exigen demasiados cuidados ya que aguantan bastante bien condiciones ambientales como la temperatura. Por ejemplo, sí que debemos evitar que toquen el suelo para que no se pudran.
Respecto al agua, es interesante regarlas cada 3-4 días en invierno sin que se formen charcos en la maceta. De esta forma evitaremos el exceso de humedad que puede perjudicar el crecimiento de la planta.
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Recolección de las fresas
Aproximadamente, desde la plantación hasta la recolección de las fresas suelen pasar unos 10 meses, dependiendo de la variedad de fresa que estemos trabajando.
Si hablamos de meses concretos, suele ser entre mayo y junio la época ideal de recolección para evitar que el calor veraniego estropee las fresas. Recuerda que las fresas aguantan bastante bien el frío invernal, pero no sucede lo mismo con las altas temperaturas que pueden llegar a afectar negativamente a las fresas.
Recuerda que el momento óptimo para recolectar las fresas es cuando están completamente rojas. Con la pérdida de color viene acompañada una pérdida de sabor y matices organolépticos. Por lo que debemos vigilar muy bien el aspecto visual, que será clave en otros aspectos y parámetros de calidad de la fruta.
