“Al principio de la temporada solo disponíamos del 50% del riego. Más tarde, con las lluvias de Semana Santa, estas restricciones fueron más leves y pudimos utilizar el 75% del agua. Esto condicionó la primera parte de la campaña; en su arranque, en los primeros estadios, la planta sufrió estrés por el calor y la poca dotación de agua” matiza Rafael Domínguez, gerente de Freshuelva.
Además de estas circunstancias, los cultivos también se vieron afectados por la falta de materias activas para la desinfección de los suelos, que provocaron que la plantas no contarán con la vigorosidad habitual. “Este es el segundo año de restricciones en el uso de materias activas y los productos que se utilizan, no son tan eficientes como los que estaban autorizados anteriormente y que sí utilizan nuestros competidores”
Con estos datos, el ejecutivo asegura que “la productividad ha estado por debajo de la campaña pasada en fresa. Sin embargo, los mercados han mantenido un buen comportamiento.”
Solo en este último mes se ha empezado a notar la presión de los berries locales en aquellos países que son compradores habituales de fresa española. “Cuando entran en producción los berries franceses, alemanes o belgas se nota mucho y las exportaciones disminuyen porque los supermercados apuestan por la fruta local.” Si a ello sumamos el mal tiempo en destino, el final de campaña no será lo bueno que hubiéramos deseado y cerraremos con un tonelaje inferior a la anterior campaña.”
Respecto al arándano, Domínguez explica que “es pronto para llegar a una conclusión final de campaña, pero la perspectiva es optimista ya que contamos con variedades más tempranas, con las que hemos llegado muy bien a los mercados durante febrero y en marzo.”
En cuanto al comportamiento de la frambuesa, el directivo, explica que “el 21% menos de tonelaje que se ha conseguido este año, ha implicado un comportamiento muy estable. Prácticamente no hemos tenido ni un solo momento de exceso de oferta. La campaña se puede calificar de muy regular, con unos precios muy mantenidos.”
La frambuesa onubense tiene una fuerte competidora con la marroquí, que marca los precios en el mercado. “Nuestros costes de producción quedan muy por encima de los marroquíes y no podemos competir en igualdad de condiciones” asegura el directivo.
En cuanto a los problemas hídricos de la provincia, Domínguez explica que “en Huelva seguimos luchando para que el año que viene podamos contar con las infraestructuras suficientes. El principal caballo de batalla de nuestras producciones lo constituye el agua y el segundo la mano de obra.”
Respecto a este último, el contingente de personas que vienen de países no comunitarios ha ascendido este año en torno a las 14.000, de las que 12.500 proceden de Marruecos, 500 de Colombia y el resto de Ecuador y Honduras. “Cada vez se retira más personal del agro para ir al sector servicios u otros y resulta más difícil encontrar mano de obra que quiera seguir en la agricultura,” concluye el directivo.
En estos momentos, Freshuelva se encuentra ultimando los detalles del 9º Congreso de Frutos Rojos en la ciudad de Huelva, que se celebrará los días 19 y 20 de junio, y que siempre despierta muchas expectativas. El evento hará un recorrido por todos los aspectos del sector de la fresa y los berries y ya tiene confirmado el panel de ponentes internacionales que participarán en el mismo.


































































































