Cilsa, la sociedad que explota la Zona de Actividades Logísticas (ZAL) de Barcelona, ha firmado un préstamo de 20 millones con CaixaBank con el que podrá terminar todas las inversiones que tiene previstas para agotar el terreno que tenía disponible. Cilsa está participada por el Puerto de Barcelona y Merlin.
Tras adjudicarse varios terrenos en la Zona Franca de Barcelona -entre ellos, los de la antigua factoría de Seat-, la compañía dirigida por Alfonso Martínez se había propuesto desarrollar 302.290 metros cuadrados de superficie bruta alquilable en Barcelona y El Prat. Con ellos, el parque logístico llegará a los 920.000 metros cuadrados.
Se trata de la zona con la renta más elevada de la capital catalana por su cercanía al Puerto de Barcelona y a la propia ciudad, en cuyo entorno más inmediato apenas queda espacio disponible.
Cuando termine el proyecto actual se habrán construido diez naves logísticas. Entre los clientes que han entrado en los últimos años, destaca Decathlon, con 96.000 metros cuadrados. Otros han sido Lidl-Europa, Damm, UPS y Caprabo.
La deuda bruta de Cilsa se ha elevado a 163 millones, un 87% de la cual tiene al BEI como acreedor. La compañía cuenta con unos ingresos garantizados por los contratos firmados de 672 millones.
Fuente: Expansión