Un comunicado recién llegado de Afruex hace pensar que Extremadura está pensando en pedir su independencia. “Como incomunicados llevamos toda la vida, lo cual nos hacía independientes, ahora que finalmente desde Madrid nos dicen que tendremos conexiones ferroviarias electrificadas e incluso un AVE, hemos decidido poner una frontera terrestre, que limite bien las provincias de Badajoz y Cáceres del resto del territorio español,” explicaron fuentes de la Junta de Extremadura.
La cuestión en sí está yendo muy deprisa, y el nuevo país, aún sin reconocimiento por parte de la ONU, ya ha firmado varios protocolos de exportación de frutas: el primero de ellos, con el Principado de Mónaco, a donde llegarán las primeras cerezas del Jerte esta primavera y harán las delicias de su Alteza el Príncipe Alberto y familia. El segundo país elegido es el Vaticano ya que su Santidad ha mostrado un gran interés por la fruta de hueso de la región, principalmente por la ciruela.
A pesar del éxito obtenido en ambas negociaciones, desde Afruex han informado que la escasa población de ambos países incita a seguir trabajando y abrir nuevos horizontes de exportación porque si no cada extremeño deberá comer este verano unas 15 frutas al día para contar con una oferta y demanda adecuada.