Pese a las dificultades por la sequía, empresas como Agroter apuestan por mantener la superficie para alcanzar los 15 millones de kg de 2016
La SAT lorquina espera reeditar la producción de 2016 con 15 millones de kg de brócoli, 2,5 millones kg de coliflor y 3 millones kg de alcachofa (en el caso de la sandía sumarán 9 millones kg más, alcanzando los 30). “Corremos el riesgo”, dice el presidente, Vicente Ruiz, “y lo hacemos para intentar atender a nuestros clientes”. Y es que el consumo de brócoli no deja de crecer a nivel europeo, con 5 kg per cápita en Reino Unido, una cantidad a la que siguen de cerca Alemania y Francia. “Desde que el rector de la Universidad de Londres dijo en televisión que el brócoli tenía numerosos beneficios para la salud, el consumo empezó a crecer”, recuerda Ruiz. Una tendencia alimentada por las corrientes ‘healthies’ de los consumidores, que abogan cada vez más por la ingesta de superalimentos. Incluso otros productos más ‘tradicionales’ como la coliflor están volviendo a reflotar tras unos años de capa caída. “Han aumentado los pedidos, en Europa se busca más este producto y hemos tenido que incrementar los volúmenes”. Esto, unido a las nuevas variedades de las casas de semillas, ha favorecido las ventas del producto español. “Las altas temperaturas hacían que la pella adquiriera un color más amarillento, mientras que con los materiales de ahora conseguimos un color más blanco, el que quieren los mercados del resto de Europa”.
La mayor parte de las ventas de Agroter se concentra en la UE, un mercado natural donde no dejan de crecer. “Estamos ampliando cuota comercial en Polonia y República Checa, y el año pasado empezamos a operar en Noruega”.
La firma cuenta con fincas en Lorca y deslocaliza la producción a zonas más altas en verano, pasando a Castilla-La mancha y Granada. Produce y comercializa en fresco, principalmente, y desde hace unos años ha iniciado una línea de floretas de brócoli que crece poco a poco. Su próximo reto es el cultivo ecológico. “Estamos en plena reconversión de dos de nuestras fincas, y ya las tenemos en residuo cero”.