La Plataforma para la Defensa del Sector del Transporte de Mercancías por Carretera ha convocado un paro de carácter indefinido el día 14 de marzo, “de todo tipo de transporte y de toda clase de ámbito”, apuntan desde la Plataforma.
En el comunicado de la Plataforma explican: “Desde este momento y hasta la fecha de inicio del paro, se le da de tiempo a los ministerios competentes para que se sienten a negociar con los representantes de esta organización y alcanzar los necesarios acuerdos que sean publicados en el BOD, y solo de esta manera se desconvocaría dicho paro”.
“El 90% de las empresas de transporte (medianas y pequeñas) nos encontramos en una situación económica de quiebra total, al igual que las condiciones laborales son de total precariedad en todos los sentidos. Consecuencias que pagan de manera directa todos los conductores asalariados a los cuales defenderemos en las demandas exigidas”, declaran desde la Junta directiva Nacional.
Por otro lado, la asociación del transporte internacional Astic ha encendido la alarma de una posible situación de desabastecimiento de todo tipo de bienes y la consiguiente debacle económica si no se asegura la continuidad de un sector en el que operan 104.000 empresas en España. El 95% de las mercancías con destino interior viajan en camión, al igual que el 70% de las exportaciones a Europa. El colectivo se siente estratégico y demanda “medidas excepcionales de manera inmediata”.
La escalada de precios afecta tanto al gasoil como al gas natural comprimido (GNC) y licuado (GNL) que consume la flota española de 360.000 camiones. El Gobierno, a través de la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, ya reconoció días atrás al transporte por carretera como el eslabón más débil de la cadena logística y anticipó medidas para absorber el impacto del coste energético incluidas en el Real Decreto-Ley del transporte de mercancías por carretera aprobado el día 2.
El citado Real Decreto fija la revisión obligatoria y automática del precio del transporte cuando sube el diesel, y establece la fórmula de la compensación. Un reequilibrio que anteriormente quedaba sujeto al acuerdo entre cargador y transportista. Los usuarios del transporte tienen ahora un plazo de seis meses para adecuar sus contratos al contenido de la norma. Pero este último margen resulta excesivo, se opina en Astic, en el contexto actual.