Los miembros de la Interprofesional hacen un llamamiento para que todos los eslabones de esta cadena, desde el productor al vendedor final, cuiden las buenas prácticas de manipulación, almacenamiento, transporte y distribución de melón y sandía, pues esta apuesta por la calidad repercutirá favorablemente en el consumo y en la imagen proyectada hacia los compradores, fundamental a la hora de elegir qué productos consumir.
Respecto a los productores reiteran que deben recolectar las frutas en su momento óptimo de madurez, para que lleguen así en todo su esplendor de aroma y sabor a los compradores finales.
Desde la Interprofesional rechazan abiertamente las malas prácticas, tanto de agricultores, como de almacenistas o distribuidores, con melones y sandías, pues el mal aspecto de estas frutas hace un daño gravísimo a todo el sector.
Recomiendan un manejo cuidadoso desde el campo hasta los lineales de venta, pues ello repercutirá en una mejor venta del producto de cara a los consumidores.
También, instan a evitar imágenes de melones y sandías apilados de malas maneras en remolques, vehículos, almacenes y comercios.
Por último, inciden en la importancia de la imagen para el consumidor actual, por lo que defienden que el sector del melón y la sandía debe seguir apostando por la calidad de estos productos de una manera global.